You are here
Home > Internacional > Pasos en la azotea

Pasos en la azotea

A Dilma Roussef, presidenta de Brasil, las cosas no le están saliendo bien. Primero tuvo que soportar la crítica feroz de los inconformes con los gastos que generó el Mundial. Después, la lesión de Neymar, en cuya genialidad con el balón depositaba sus esperanzas de que Brasil se llevara el título. Finalmente, la goliza despiadada que le propinó Alemania a su equipo, y la salida del Mundial con esa derrota humillante.

Pero lo suyo no es el futbol, sino la política. Y en este terreno sus apuestas tampoco van bien. La muerte de Eduardo Campos abrió un hueco muy difícil de llenar en la contienda electoral, y su antigua compañera de fórmula ha tenido un crecimiento que representa un peligro para la actual presidenta.

Marina Silva, quien fuera también la Ministra del Medio Ambiente del gobierno de Lula, se ha colocado de golpe en el segundo lugar de las preferencias electorales, encima del socialdemócrata Aécio Neves. Si bien Dilma Rousseff mantiene aún su 36%, el 21% de Marina puede obligar a la segunda vuelta de los comicios, y ahí dar la batalla final. Dicen que caballo que alcanza gana la carrera.

Mientras la popularidad de Dilma se empaña, la de Marina sube como la espuma. Hija de unos recolectores de caucho, la pequeña Marina no tuvo oportunidades para ir a la escuela. Sin embargo, gracias a su tenacidad, aprendió matemáticas a los 14 años, y a los 23 se graduó en la universidad. Se hizo comunista primero, y ambientalista después. Fue compañera de  lucha de Chico Méndez hasta que murió asesinado. Ha sido consejal en su municipio, diputada en su estado y candidata presidencial previamente. La gente la considera la defensora del Amazonas. Puede ser presidenta.

Deja una respuesta

Top