Para volver a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump tiene que ganar la candidatura del Partido Republicano a dicho cargo. Y en ese terreno tiene varios rivales a vencer. En primer lugar, una mujer. Se trata de Nikki Haley (en la fotografía) que fue Embajadora de Estados Unidos ante la ONU y ex Gobernadora de Carolina del Sur. Ella ya informó que será candidata republicana a la Presidencia de ese país para 2024. Haley afirma que va a revitalizar el partido, y que va a conducir un país que, a su juicio, ha perdido el rumbo en los últimos años y es víctima de tensiones raciales.
Junto a ella aparece también Ron deSantis, Gobernador de Florida, quien puede estar a meses de declarar públicamente sus intenciones presidenciales. DeSantis ha ganado fama por apoderarse de la Junta que controla los parques temáticos de la firma Disney, y a quien Donald Trump, con su estilo desparpajado, catalogó como «un pedófilo». A su lado se encuentra Mike Pence, el exvicepresidente que defendió a Trump cuando éste pidió una investigación sobre Joe Biden y su hijo, y un poco más lejano en las encuestas se encuentra Mike Pompeo, que fue Secretario de Estado en el gobierno de Trump, y que se mostró favorable al espionaje masivo. Su plan de acción se sintetizó en el ideal de tener, en sus propias palabras, una CIA «más agresiva, brutal, despiadada e implacable».
¿Hay alguien que esté a la derecha de Donald Trump? Bueno, pues en el Partido Republicano son varios los que luchan por ganar esa etiqueta.