En la recién abierta pelea por combatir el terrorismo y defender la privacidad entre Apple y el FBI, el creador de Microsoft ha decidido intervenir para detener la tormenta. Bill Gates dijo al Financial Times que había que buscar un punto intermedio para satisfacer a ambas partes. Que no se trata de abrir las puertas al gobierno para intervenir en la vida privada de los ciudadanos. Que se trata de un caso específico -en este caso Syed Farook, el terrorista que asesinó a 14 personas en San Bernardino, California-, y que todas las partes deberían ponerse de acuerdo para detener el terrorismo. Es la postura más sensata de todas.