¿Quién se apunta para Los Pinos en 2018? Las manos alzadas, abiertamente o con discreción, son las de Andrés Manuel López Obrador, Margarita Zavala, Miguel Ángel Osorio Chong, Ricardo Anaya, Miguel Ángel Mancera, Luis Videgaray, Rafael Moreno Valle, Pedro Ferriz de Con, Jorge Castañeda, El Bronco, Manuel Velasco Coello, Aurelio Nuño, Eruviel Ávila. El futurismo despostillado de siempre. Es un uso y una costumbre que se repite de la mitad de cada sexenio en adelante. En el fondo, se cree que los ciudadanos apuestan a que en el próximo sexenio la triste suerte de este país ahora sí dará la vuelta. Que el próximo sexenio todo cambiará. Que habrá desarrollo. Que se acabará la corrupción. Que habrá, por fin justicia.

Parece una hipnosis colectiva. El tema chorrea especulaciones en los medios, se instala en las sobremesas, recorre los pasillos de oficinas y partidos políticos.

Pero todas las esperanzas son falsas. Eso lo sabemos, pero no lo asumimos a cabalidad. Preferimos esperar a que el futuro nos resuelva el desastre de país que hemos creado.

Habría que empezar por hacer cosas en el presente. ¿De qué sirve un cargo en el futuro? Solo es el espejismo de tener un mayor poder. Pero una vez que se llega a los Pinos, empieza el declive. Y luego, la debacle.

Alguien que se interese realmente por el país, no piensa en escalar puestos en el futuro. Empieza por resolver los problemas en el presente, y no como parte de su campaña. Desgraciadamente, no existe un político de esa talla. Y si existe, ese sí, que levante la mano.