En un resultado insólito, los votantes de un referéndum en Colombia le dijeron NO a los acuerdos de paz entre el gobierno y las FARC. La negativa ganó por un 0.2%, y ahora mucha gente piensa que el desarme de las FARC quedó en el aire. La votación quedó 49.8% a favor del acuerdo, y 50.2% en contra.
Fue algo parecido -salvando todas las distancias- a lo que sucedió en Gran Bretaña con el Brexit. Allá, el primer ministro David Cameron organizó un referéndum para votar por la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea y de esa manera afianzarse en el poder, convencido de que los votantes le darían el SI. Y perdió. En Colombia, el presidente José Manuel Santos confió en que un referéndum fortalecería el proceso de paz, y también perdió.
En Colombia el tema más delicado era el perdón para los miembros de las FARC que confesaran su participación en los crímenes, y el expresidente Álvaro Uribe se convirtió en el adalid de la negativa.
Después del referéndum, el líder de las FARC -conocido como Timochenko- declaró que el proceso de paz «continuaría en los términos pactados con el gobierno, ya que el referéndum no tuvo efectos legales».
La guerra civil en Colombia ha arrojado un saldo de 260,000 muertes.