La noticia hundió más aún al peso mexicano. Se acabaron las nuevas inversiones de Ford en México. La firma automotriz canceló los planes para instalar una nueva planta de mil 600 millones de dólares en San Luis Potosí. En su lugar, Ford invertirá 700 millones de dólares en la expansión de una planta propia Flat Rock, Michigan. Round para Donald Trump.
Durante su campaña, Trump criticó duramente a la empresa por sus planes para invertir en México. Se sabe que Trump tiene una ideología que se opone a la globalización, porque se lleva los empleos que -a su juicio- deberían estar en Estados Unidos. Ante sus devaneos, muchas empresas han declarado que sus palabras les traen sin cuidado. Tal es el caso de Walmart, que anunció la continuidad de su política expansionista en México. Pero otras, como Ford, prefieren regresar a Estados Unidos con el rabo entre las patas. El Director General de la empresa, Mark Fields, dijo en un evento que las políticas que Trump y el nuevo Congreso seguirán son de vital importancia para la decisión de la empresa. No importa que el salario en Estados Unidos sea 10 veces superior al de México, y que las ganancias de Ford disminuyan por darle gusto al nuevo mandatario.
La inversión en la planta de Michigan generará 700 nuevos empleos.
Sin embargo, la victoria de Trump no es absolulta. La empresa anunció en agosto del año pasado que en la nueva planta en México fabricaría vehículos compactos, como el Focus, y se preveía que iniciara operaciones en 2018. Ahora, con la cancelación de los planes, la próxima generación del Focus será construido en la planta que Ford ya tiene en Hermosillo, Sonora.
¿Qué pierde México? Simplemente la inercia de montar la política de creación de empleos en las inversiones extranjeras. El proyecto en San Luis Potosí iba a crear 2 mil 800 nuevos empleos directos en los próximos 5 años. Se iban a invertir 700 millones de dólares. Tanto el gobierno federal como el gobernador Juan Manuel Carreras lamentaron el retiro de la Ford.
La pérdida de empleos anunciados es un desafío. ¿Cómo crear 2,800 empleos? La ganadería de San Luis Potosí tiene un potencial enorme. Y el mercado interno es un territorio ávido de productos.
Además, no toda la industria automotriz es Ford. En San Luis Potosí están también las armadoras de Chsysler y BMW. Esta última anunció también una inversión de mil millones de dólares el próximo año en México.
¿Y de dónde sacar los 1,600 millones de dólares que no invertirá la Ford? En pesos mexicanos actuales, se trata de 33,600 millones de pesos. Eso podría salir del dinero que se esfuma sexenalmente en los estados. En Veracruz, por ejemplo, el gobierno de Javier Duarte desapareció 35 mil millones de pesos. Eso representa más que la inversión que iba a realizar la Ford en San Luis Potosí. Y era dinero mexicano.