Aparentemente los virus no distinguen las razas de las personas que afectan. Pero eso no es así. Los habitantes negros y latinos de Estados Unidos han registrado el triple de infecciones que sus vecinos blancos, según los nuevos datos de las encuestas, que incluyen características detalladas sobre 640.000 infecciones detectadas en casi mil condados estadounidenses. Además, el virus ha causado casi el doble de defunciones de personas negras y latinas que de blancos, según las investigaciones.
Los datos también mostraron varios focos de disparidad entre los nativos estadounidenses. En gran parte de Arizona y en varios otros condados, los indígenas son mucho más propensos a infectarse que los blancos. Para las personas asiáticas, las disparidades generalmente no eran tan grandes, aunque tenían 1,3 veces más probabilidades de infectarse que sus vecinos blancos.
“Somos más vulnerables a esto”, se lamentó Marvin Bradley, el hombre que aparece en la foto con su esposa.
En el condado de Kent del estado de Michigan, que incluye Grand Rapids y sus suburbios, los residentes negros y latinos han sufrido el 63 por ciento de las infecciones, aunque solo representan el 20 por ciento de la población de ese condado. Los funcionarios de salud pública y los funcionarios del estado dijeron que no se sabe a ciencia cierta por qué las personas negras y latinas del condado de Kent se han visto más afectadas que en otras partes del país.
De los 249 condados con por lo menos 5000 residentes negros de quienes el diario The New York Times obtuvo datos detallados, en todos -salvo en 14- la tasa de infecciones es más alta para los residentes afroestadounidenses que para los residentes blancos. De manera similar, de los 206 condados con por lo menos 5000 residentes latinos analizados por el Times, 178 registran tasas de infección más elevadas para los residentes latinos que para los blancos.