Una vez que se diluyan los berrinches de Donald Trump por haber perdido la elección, el panorama al que se enfrentará Joe Biden no está nada fácil. La pandemia no se ha detenido, En Estados Unidos ha afectado a más de 18 millones de personas y se ha llevado a la tumba a más de 323 mil habitantes. El desempleo, aunque disminuyó los últimos meses, se mantiene por encima de las 800,000 personas sin trabajo. El racismo no tiene cifras que lo midan, pero sigue afectando a todos los rincones del país, aunque especialmente en los estados de Alabama, Tennessee, Mississippi y Georgia, entre otros.
Hay otros problemas que no son exclusivos de Estados Unidos, pero que se tienen que enfrentar con decisión. Por ejemplo, el cambio climático que corroe al mundo -y que Trump negó sistemáticamente- y el cúmulo de noticias falsas que se presentan como verdades indiscutibles.
Joe Biden ya está conformando su equipo. El gabinete de Trump era básicamente blanco, masculino y de ideas conservadoras. El equipo de Biden busca el equilibrio entre hombres y mujeres, la inclusión de políticos de raza negra y una ideología de unificación entre las posturas opuestas. «Estados Unidos está de vuelta», dijo Biden al presentar a los miembros de su gabinete.