En materia de empleo, México se mueve hacia atrás. El déficit que ha acumulado el país en empleo formal asciende a 15.1 millones de puestos en los últimos 18 años, calculó el observatorio México ¿Cómo Vamos? El cálculo se hizo a partir de series históricas de la población y del mercado laboral que emiten el Consejo Nacional de Población y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía

El organismo informó que entre 1997 y 2015 se han registrado 7.7millones de empleos en el IMSS; mientras que lo requerido para incorporar a quienes ingresan al mercado laboral ha sido de 22.8 millones de puestos, es decir, 1.2 millones de empleos por año.

¿Y a dónde se dirige la gente que no tiene empleo formal? Pues al empleo informal, que se calcula modestamente en el 57% de la fuerza laboral en México. Nada del otro mundo, porque en nuestro país la economía informal no es economía ilegal. Ahí se encuentran los boleros, los dueños de puestos ambulantes, los cilindreros, los sacerdotes y los trabajadores de muchas empresas formales que se dedican a la informalidad por abajo del agua.

El problema, visto a largo plazo, es que sin una economía formal en toda la extensión del término, el país no puede aspirar, como dicen los optimistas, a una redistribución del ingreso. Estamos condenados a la pobreza y la injusticia social.

(Con información de Excélsior)