El presidente Xi-Jinping de China visitará este año Estados Unidos. El rumor fue confirmado por el embajador de China en Washington, y las autoridades norteamericanas no lo desmintieron.
La visita forma parte de una estrategia global de Beijing, en la que Estados Unidos deberá entender a mediano plazo que ya no será la primera potencia económica y financiera del mundo. Si bien las estimaciones del año pasado sostienen que la riqueza de Estados Unidos superó los 16.7 billones (millones de millones) de dólares y la de China fue de 9.1 billones de dólares, hay indicios de que en los próximos años el dragón chino va a superar a la capacidad productiva del Tío Sam.
Para empezar, la producción de China ya supera a la de sus dos rivales inmediatos juntos, que son Japón y Alemania. Y la riqueza china también se concentra, como en cualquier país capitalista, en unas cuantas manos. El año pasado el número de millonarios chinos fue solo superado por los millonarios norteamericanos, pero se sitúa lejos de los demás países. Y es bien sabido que el gigante de comercio electrónico chino Alibabá rompió récords de estreno en Wall Street, y se sitúa como el primer mercado de Internet en el mundo.
Aunque no será la primera vez que se reúnen los presidentes Xi-Jinping y Obama, la visita servirá para estrechar muchos lazos, y pondrá en el escaparate la nueva política que tendrá que implementar China para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero, y contribuir así al combate mundial contra el cambio climático.