Los Globos de Oro estuvieron en la mira de los críticos durante las últimas semanas, porque de los 90 miembros de la Asociación de Prensa Extranjera en Hollywood que vierten sus opiniones para definir a los ganadores, ninguno de ellos es negro.

Y eso, en un país que se dice el ejemplo de la democracia y la igualdad, no puede pasar desapercibido. Las protestas se multiplicaron. Tom Hanks devolvió su globo de oro entregado recientemente como protesta. Tom Cruise devolvió los cuatro galardones que le entregaron en el último lustro. La NBC canceló la trasmisión de la ceremonia en la televisión.

Pero hoy en la noche, aunque la ceremonia de los globos de oro se trasmita en la oscuridad, el premio puede resurgir de las cenizas nominando a uno o varios ganadores que sean de color -como se dice elegantemente-; es decir, negros.

Y la mesa está puesta a la hora de nombrar al mejor actor de drama.

Los nominados son:

• Mahershala Ali, por Swan Song
• Javier Bardem, por Being the Ricardos
• Benedict Cumberbatch, por The Power of the Dog
• Will Smith por King Richard, y
• Denzel Washington, por The Tragedy of Macbeth

De los cinco nominados, solo Javier Barden y Benedict Cumberbatch son blancos.

Las apuestas están en su contra.