Oficialmente, hay 32 países que participan en la Copa del Mundo de Qatar. Pero haya 130 jugadores que participan en la máxima Copa y que representan a un país distinto del que nacieron, lo cual es un botón de muestra de las complejidades del mundo.
Por eso algunas estrellas mundiales del futbol, como Samuel Eto´o, ahora se dedican a persuadir a los jugadores para que su lealtad sea hacia su nación de origen, y que no cambien de nacionalidad por conveniencia. Eto´o busca que la selección de su natal Camerún sea lo más competitiva, con jugadores del más alto nivel.
Claro que el mundo da muchos giros inesperados, y que las más sólidas predicciones se derrumban conforme rueda el balón. Nadie esperaba, por ejemplo, que un equipo de los mal clasificados, como Arabia Saudita, le fuera a ganar a Argentina, uno de los favoritos para llevarse la copa de campeón.
Ese día, el rostro derrotado de Lionel Messi, el mejor jugador del mundo, lo decía todo: ya no hay certezas, Goliat puede ser vencido infinidad de veces por David, en todos los partidos la moneda está en el aire.