Entre las ideas que se han vertido para mantener el impulso social que surgió a raíz de los recientes sismos, el Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción propone la creación de una comisión conformada por diferentes fuerzas para evaluar los casos en los que las construcciones se derrumbaron a causa de la corrupción, y con el fin de darle seguimiento y supervisión a los recursos destinados a la reconstrucción.

Dice el Comité en un comunicado:

Es por ello que invitamos a todos los actores de la sociedad civil, de los sectores público, social y privado, y a los gobiernos involucrados, a que participen en esta iniciativa con el fin de establecer una colaboración permanente que garantice una adecuada rendición de cuentas y un proceso de reconstrucción eficiente.

La capacidad de organización, la fortaleza, decisión y altruismo que ha enseñado la ciudadanía mexicana ante la adversidad y la tragedia de las últimas semanas muestran el potencial de transformación que tenemos como país. Ha llegado la hora de contribuir no solamente a un proceso de reconstrucción eficaz y libre de corrupción de la infraestructura física, sino también de colaborar en la articulación del tejido social de la nación.

A todo el mundo le consta que el potencial de México está en las nuevas generaciones. Ellas hablaron desde los momentos posteriores a los sismos. Levantaron el nombre de México en el mundo. Y esa fuerza no puede olvidarse. Porque en efecto, como dice el Comité, necesitamos un proceso de reconstrucción eficaz de la infraestructura. Pero también una restauración del tejido social, desmembrado por la corrupción y la violencia.