El narcotraficante Osiel Cárdenas, líder del Cártel del Golfo, logró una buena negociación con la DEA (Drug Enforsment Administration). El capo fue arrestado en México en 2002, y deportado a Estados Unidos en 2007. El año siguiente, gracias al convencimiento de sus abogados, negoció una reducción de sus años en prisión a cambio de una fuerte suma de dinero y de delatar a sus compañeros de armas.
La multa que tuvo que pagar Osiel Cárdenas fue de 50 millones de dólares, que se recaudaron en la estructura clandestina de los Zetas. El pago incluyó dinero en efectivo, pero también propiedades, helicópteros y aviones.
Las denuncias de Osiel Cárdenas terminaron con las cabezas más importantes del Cártel del Golfo y de los Zetas, pero también produjeron una guerra a muerte entre ellos, que terminó con un número indeterminado de muertes y sucesos espectaculares, como la quema del Casino Royal en el que murieron 52 personas.
Osiel Cárdenas logró una reducción de su pena a 25 años, por lo que saldrá de la cárcel al cumplir los 64.
(Con información de Héctor Aguilar Camín en Milenio, y un reportaje de The Dallas Morining News)