Tal vez Donald Trump no calculó la reacción de sus declaraciones. O tal vez sí, y ha sucedido justamente lo que quería. Pero definitivamente no ha salido bien librado. En México provocó un oleaje de indignación que bañó los noticieros de televisión y radio, se multiplicó en las redes sociales y desembocó en una serie de distanciamientos y renuncias que equivalen a considerar al magnate de Nueva York como una persona no grata para el país.
Televisa y la organización del Concurso de Miss México se salieron del Concurso Miss Universo -organizado por Donald Trump- y aunque Carlos Slim se negó a calificar sus declaraciones contra México, su empresa Ora TV rompió un contrato con él.
En Estados Unidos las consecuencias han sido igualmente fuertes. La cadena NBC, una de las más importantes televisores en Estados Unidos, declaró que dejaría de transmitir el certamen de Miss Universo. Los cantantes que participarían en el próximo también renunciaron. Y la famosa cadena Macy´s, mundialmente conocida, ha sacado de sus estantes toda la ropa relacionada con la línea de Donald Trump.
¿Seguirá en su alocada carrera como candidato republicano a la presidencia? Es interesante saber hasta dónde llegará. Porque sus seguidores solo serán los fanáticos que están contra México en su misma trinchera, que siguen siendo legión.
En México, mientras tanto, ya se empezaron a fabricar piñatas con su efigie. Acabar con Donald Trump a palos sólo cuesta 35 pesos devaluados, un poco más de dos dólares.